ROOM, ROOM
Una habitación llena de fotos
entre crujidos y gritos de madera,
una rosa seca y siemprevivas
en una botella de cerveza.
Miles de libros que ocultan,
silenciosos, entre el polvo y los ácaros,
el pasado pasado de otros,
en forma de réplica con que llenar el futuro.
Sigue habiendo fotos en color,
en blanco y negro, fotocopias,
fotos de desconocidos.
Otras llevan tanto tiempo
pegadas en medio de la pared
que ya nadie distingue
qué es piedra y qué papel.
Y hay una ventana
abarrotada de guardianes
que te ocultan del sol,
de la calle,
no permiten que te asomes.
QUEMANDO ESPANTAPÁJAROS
[AMOR A QUEMARROPA]
Se acerca hasta mí y le digo:
si me vuelves a besar te escribo un verso.
Pero ahora conversa con la geometría de los hielos
que se deshacen en el universo de su copa.
Sé que no debo insistir,
pero quiero tu número de teléfono,
si no me lo das haré señales de humo
con el espantapájaros de tu novio.
La acompaño hasta el portal
y hago cumbre en su ventana.
Miro cómo se desnuda.
Cuando llegan los bomberos
me deja pasar.
Hacemos el amor sin estar enamorados,
Impacientes por que llegue la hora del café.
Nos despedimos sin palabras innecesarias,
sin promesas que dejamos detrás de la ventana.
Y no le he dicho mi nombre,
ni sé cómo se llama.